En 2018, leyendo Minimalismo Digital, de Cal Newport, me encontré con una idea que resonó profundamente conmigo.
Se trataba del movimiento FIRE: Independencia Financiera, Jubilación Temprana. Un grupo de jóvenes profesionales de la tecnología que en vez de despilfarrar sus jugosos sueldos en lujos y viajes, decidieron optar por vivir de forma simple, ahorrar mucho y usar la rentabilidad de esos ahorros para poder jubilarse a los 40, o incluso antes.
No era solo una linda idea: varios ya lo habían logrado.
Descubrirlo me causó una gran impresión.
Imagínate quedar desocupado a los 40. Tener la libertad de hacer lo que tú quieras, cuando tú quieras.
Dejar de hacer las cosas para ganarte el pan y hacerlas porque responden a un interés profundo que vive dentro de ti.
Para los Millenials como yo, que idealizamos la libertad, suena como el mejor futuro posible.
Pero hubo otra idea que me pareció más interesante aun.
En Minimalismo Digital, también aparece el libro Walden: las memorias y reflexiones del autor Henry David Thoreau, escritas durante los dos años que pasó viviendo en soledad en una pequeña cabaña cerca del lago Walden.
En este libro, Thoreau reflexiona sobre el tiempo y el verdadero costo de las cosas, dejándonos una cita muy interesante:
"El costo de una cosa es la cantidad de vida que se requiere intercambiar por ella, ya sea inmediatamente o a largo plazo."
Solemos pensar en el costo monetario de lo que compramos. Pero Thoreau nos invita a hacer otro ejercicio: pensar en el dinero como tiempo de tu vida.
Si tu sueldo es de 100 al día. Y te compras un auto que vale 20.000, entonces comprarlo te ha costado 200 días de vida.
La relación inversa también es correcta (y quizá mas profunda): si logras vivir con 50 al día, y tu ingreso mensual es de 100: cada día trabajado te permite comprar un día de libertad en el futuro.
Lo cual nos lleva de vuelta al movimiento FIRE: trabajar para comprar tu propio tiempo, en vez de comprar cosas.
Como te conté, esta forma de ver el dinero y el tiempo caló profundamente en mí.
Comencé a ordenar mis finanzas, a ahorrar donde se podía, a evitar algunos lujos comunes que veía en mis pares. Cada vez que conseguía un aumento de sueldo, hacía todo lo posible para que no se transformara en un aumento en mis gastos también.
Por supuesto, sé que he sido tremendamente afortunado por poder hacerlo. No muchos pueden ahorrar. (Aunque de los que pueden, muchos más deberían hacerlo).
Y si bien nunca he esperado realmente lograr jubilarme a los 40, siempre supe que en algún momento, necesitaría y querría comprar algo de tiempo de vuelta.
Canjear mis ahorros por un período de libertad.
Transformar el dinero, en tiempo.
Y hoy, finalmente el momento ha llegado.
Por primer vez, sin planes
Renuncié a mi trabajo y no tengo ningún plan.
En realidad sí tengo un plan, solo uno: enfrentarme al abismo de la libertad por un tiempo y ver qué hay ahí. Qué cosas puedo aprender de mí cuando no tengo ningún compromiso.
Puede que a la semana, me aburra y busque otro trabajo. También puede que pase un año sin emplearme. No lo sé.
Es algo que me tiene emocionado, pero también asustado: desde que comencé a trabajar, hace más de cinco años, no he parado. Pero por el otro lado me siento tranquilo: creo que es el momento de mi vida correcto para parar en seco y observar.
Lo que sí haré – por supuesto – es seguir escribiéndote cada domingo con alguna idea interesante, y ojalá con algo que te haga reír (no como esta).
Ojalá me acompañes para ver cómo sale.
Para reflexionarsss
Una pregunta para ti:
¿Tiene sentido para ti ahorrar para comprar tiempo libre? ¿En vez de cosas materiales o experiencias?
Cuéntame qué opinas en los comentarios, o respondiendo a este correo.
Y, ¿quién se ganó el libro?
Ahora sí hicimos el sorteo de Meditaciones. La ganadora de esta edición fue Marisol. ¡Felicitaciones! Puedes ver el video del sorteo acá.
Muchas gracias a todos quienes participaron. Sigan compartiendo porque se vienen más sorteos más adelante.
Palabras al cierre
La edición de hoy iba a ser de otra cosa. Pero a mitad de camino lo encontré aburrido y cambié de tema. Estoy terminando de escribir el sábado tarde en la noche: espero que no se note tanto.
Cambié de tema porque me di cuenta que era el momento preciso para contarte lo que estoy pasando y lo que pienso al respecto. Después, ya no tendría tanto sentido.
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Hasta el próximo domingo.
— Francis
Había escuchado el concepto del dinero como "energía de vida" en el libro "Your Money or Your Life". Que buena saber que viene originalmente de Thoreau.
Viendo que el post es de febrero, veo que el ánimo de crear algo le ganó a la idea de descansar. Saludos!
Sentí que me estaba leyendo a mi misma en muchas partes! En renunciar sin un plan, en pasar varios miedos con lo q conlleva la decision de vivir de los ahorros, en enfrentarte al abismo de la libertad y ver que pasa, y al canjear ahorros por vida a una edad q la gente suele no hacerlo (creo?) y no aumentar los gastos con cada aumento de sueldo.
No cachaba esa frase de Thoreau pero me encantó.
Leo este post 5 meses después pero veo que te mueves rápido.
“Dejar de hacer las cosas para ganarte el pan y hacerlas porque responden a un interés profundo
que vive dentro de ti.” Fue eso lo que pasó para llegar a tu emprendimiento de mascotas?
Siento que estás en el futuro ya de lo que pasa después del período de libertad de la cesantía con ahorros. Me gusta que estuvieras abierto a que durara todo el año. Yo por mi lado, voy en ese camino con todo el gusto del mundo.
Gracias por compartir. Q bkn verme reflejada en tu experiencia.